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Los primeros habitantes

Los primeros habitantes

1)      En el término de Paúl del pueblo de Délica existió una estación al aire libre, en una zona no precisada entre la ví­a del tren y la carretera, localizada por Teodoro Uriarte. Se hallaron materiales del Eneolí­tico-Bronce: lascas de sí­lex y fragmentos de cerámica a mano.

2)      El ayalés Félix Murga, miembro del Instituto Alavés de Arqueologí­a, descubrió el año 1968 un dolmen en las Campas de la Choza, Lendoño, en compañí­a de J. González. Está situado cerca de la carretera de Orduña a Lendoño de Arriba, a una altitud de 477 metros al pie de la Sierra. Poco después, el mismo año, este dolmen, datado en torno a los años 2000-2400 a.C. con restos de inhumaciones en su interior, fue inspeccionado por J.M. Apellániz como director o codirector del trabajo, en com­pañí­a de A. Llanos y J. Fariña. A juicio de estos investigadores, el ajuar encontrado en su escombrera al N. NO. del dolmen es muy parecido al del dolmen de las Campas de Olétar: fragmentos de hoja de sí­lex, raspadores de lasca, cuentas discoidales, cinco fragmentos de vasos de distintos tipos, 60 fragmentos de cerámica, dos fragmentos de diáfisis de hueso al parecer humano, cinco cráneos humanos de los que uno solo resulta utilizable y huesos humanos en mal estado y bastante fragmentados. Los res­tos de cerámica parecen indicar que el dolmen fue utilizado en el Medievo. Cerca del dolmen y en la superficie se halló una lámina de sí­lex con retoques de uso, una lasca, un núcleo y un resto de núcleo.

3)      Cerca y al sur de la cota más alta de la peña de Atxondo, en un rellano sobre el barrio orduñés de Cedélica, debió existir también un asentamiento humano, pues en este lugar se encontró una lasca de sí­lex retocada. Probablemente corresponde al mismo lugar de habitación de Santa Cristina en la Edad del Hierro, que describire­mos en el siguiente capí­tulo.

4)      El año 1968 investigaba (Félix Murga) la cueva natural de Unguino, que en los documentos anti­guos se llama cueva de Eskutxi, situada a una altura de 1020 metros (longitud, 003450; latitud, 430200). La cueva, formada por una sola galerí­a, de conservación regular, se localiza cerca del comienzo de la ladera llamada Berozada de la Cueva que remon­tada termina en el Campo de Eskutxi. Queda próxima y al oeste de la fuente y pozo de Unguino, bajo el pico de este nombre. El material que en ella encontró en sep­tiembre del mismo año es el siguiente: 2 lascas de sí­lex, 6 fragmentos de cerámica modelada a mano, 3 de cerámica torneada y 3 restos óseos de fauna. Corresponden al Eneolí­tico-Bronce. En 1982, acompañado de cuatro colaboradores ayaleses, reco­gió en la misma cueva un fragmento de útil pulimentado en arenisca.

Federico de Barrenengoa

El Valle de Ayala (I)

 

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