Mosaico histórico de MENDEICA
Está situada en el lado Sur del monte de Burubio, lindante con el valle de Ayala por Echegoyen. En la cima del citado monte existió una ermita, la de Santa Cruz de Burubio, lugar de encuentro de los vecinos de Orduña y los ayaleses de Amurrio y su entorno.
Mendeica es, seguramente, una de las parroquias que comprendidas bajo el título global de “Belandia y sus aldeas” se registraba en 1257 en la carta de Don Jerónimo Aznar.
Extiende sus caseríos en un pequeño valle de pastizales y tierras de cultivo entre las alturas que la separan de Belandia, Lendoño de Arriba y Lendoño de Abajo.
Nunca alcanzó que superase en mucho los diez vecinos registrados en 1556, momento en que servían a su iglesia dos beneficiados. Entre 1542 y 1545 correspondían a éstos, once fanegas y media de trigo, cuatro de cebada, seis corderos, fanega y media de minucias y 497 maravedís y medio de dinero. Estas cantidades se consideraban pequeñas comparadas con otras parroquias del entorno, también se consideraba exigua la cuota anual destinada a la fábrica de la iglesia, una fanega de trigo. Entonces ya existía en Mendeica una ermita con una renta anual de dos celemines de trigo, seguramente la de Santa Ana.
Los libros de cuentas de la aldea se conservan únicamente desde 1728. El libro anterior a esta fecha, 1727, se encontraba en casa del vicario de Orduña y desapareció en la noche del 14 de octubre de dicho año “en el incendio que en la calle viexa padeció de trece casas” la ciudad de Orduña.
En esta aldea se acusa la falta de rentas con las que apenas se alcanzaba a cubrir el gasto del aceite de la lámpara, la cera, el incienso y el subsidio. En 1776, cuando se intentaba paliar “la lobreguez y estrechez del único altar” de la iglesia, la parroquia podía aportar sólo unos pequeños frutos de tres fanegas de trigo al año, con los que era imposible afrontar los gastos de la obra que, según se exponía en el proyecto, “deveran satisfacer y pagar los vezinos de dho lugar”. En 1808, antes de la guerra de la Independencia, los vecinos participaban en las obras de la iglesia, así como en la erección de su espadaña en 1880 y en otras mejoras realizadas antes en el templo.
Al comenzar el siglo XIX contaba la aldea con 13 vecinos y 60 habitantes y, al mediar el mismo, con 11 vecinos, 61 personas y un beneficiado al servicio de su parroquia. Por entonces los dos caseríos que componían el cercano barrio de Aquesolo, recibían los sacramentos pascuales de manos de los clérigos de Orduña, en la iglesia de San Clemente de Arbileta, en la que se bautizaban los varones, mientras las hembras se llevaban a Lendoño de Abajo. El cura de esta parroquia, más próxima que la de San Clemente, administraba a todos el viático y la extremaunción, y se enterraban en su parroquia; no obstante, el cabildo de Orduña, perceptor de los diezmos, iba a levantar los cuerpos a Aquesolo, y de allí los acompañaba a Lendoño de Abajo, donde los recibía el cura de la parroquia. Administrativamente, los dos caseríos de Aquesolo dependían en “lo temporal” uno de Saracho y el otro de Mendeica.
En 1888 se computaban en Mendeica 13 edificios con 72 habitantes. Al comenzar la actual década tenía Mendeica 24 habitantes.
Parroquia de San Miguel
Es de construcción rural, de planta rectangular. Se construía esta iglesia sobre otra anterior más reducida, en el año 1776, previa licencia e informe de los canteros orduñeses, Pedro de Palacio y Juan de Perea. La obra la realizó el cantero Roque de Respaldiza. Durante las obras se celebraron los cultos en la ermita de Santa Ana.
La espadaña de la iglesia es de sillería de 3 cuerpos, uno macizo y dos de campanas. Se erigía hacia 1880 y estaba sin terminar y sin campanas en 1883. En 1887 se reseñaban “dos campanas recién bendecidas”.
La iglesia antigua, posiblemente, era de origen medieval, así como su campanario.
El retablo mayor es neoclásico, sencillo y de pequeñas dimensiones con una talla de San Miguel, en las hornacinas laterales van dos imágenes modernas de la Virgen del Rosario y San Antonio Abad.
Ermitas desaparecidas
Hubo en Mendeica una ermita dedicada a Santa Ana, de origen medieval, documentada en 1556, aunque en los libros de la parroquia aparece registrada sólo desde 1740. La ermita figura en las visitas pastorales de 1740, 1757, 1763, 1767 y 1772. Esta ermita no se citaba ya en la visita pastoral de 1818.
También existió otra ermita, situada aproximadamente, a un kilómetro del pueblo, la de la Santa Cruz de Burubio, de mucha devoción en Orduña y alrededores.
Fuente: Catálogo Monumental de la Diócesis de Vitoria (Tomo VI), Micaela Portilla.