RUZABAL (Educación)
1.-Algunas cuestiones generales
A mediados del siglo XIX se regula la figura del maestro en la ley de Claudio Moyano de 1857. Aunque el Estado regulaba la enseñanza obligatoria de los 6 a los 12 años, en la práctica dependía de los municipios o de la iniciativa privada.
Aunque carecemos de documentación sobre el particular, es muy probable que la educación en las aldeas hasta el siglo XIX, se diese en el seno de las parroquias, al hilo de la enseñanza de la doctrina cristiana impartida por los párrocos.
En la sociedad orduñesa tradicional , la transmisión de conocimientos se producía de manera oral. A partir del siglo XVI se producen cambios de envergadura. Era preciso alfabetizar a la población. Leer y escribir constituían unas habilidades básicas para pretender ciertos cargos públicos.
En las aldeas de Ruzabal dada la lejanía de la ciudad y su propia capacidad de autonomía, les obligó a dotarse de maestros. En Belandia el 24-9-1828 adopta el Concejo el disponer de un maestro de primeras letras. Para conseguirlo se decide una forma de financiación mixta. La renta perpetua de 17 fanegas a favor del maestro, se pagaría por todas las casas al 50%, y el otro 50% por los padres de los niños de 5 a 10 años que asistiesen a la escuela.
Los requisitos que debe tener el maestro, son: católico, de buena vida y costumbres, a los que se añade que sepa leer, escribir, contar, doctrina cristiana y enseñar a los niños “con amor, perfección y cariño”. Se le añade la obligación de tocar las campanas y encender la lámpara de la fábrica de las iglesias.
En los años posteriores se producen algunas modificaciones. En 1846 se fija la edad escolar entre los 6 y los 12 años, y las cuotas a pagar son diferentes según los alumnos aprendan a leer, 2 celemines de trigo, o aprendan a escribir y contar, 3 celemines. Al finalizar el siglo sube la cuota a 4 celemines para los escribientes y en 3 para los que no lo son. También se incrementa la retribución del maestro, de las 17 fanegas de trigo iniciales se pasa a 20 fanegas en 1892 y a 24 en 1902. Son los llamados maestros trigueros.
Las obligaciones del Concejo no se limitan a destinar una renta para la retribución del maestro. Alcanzan al mantenimiento y dotación de las escuelas donde se imparten las clases. Así, todos los vecinos de Belandia solicitan al alcalde de Orduña, autorización para rematar árboles viejos destinados a leña o carbón, y roturar 20 aranzadas del ejido común, al objeto de conseguir 2.500 reales para reformar un cuarto en la casa del Concejo destinado a escuela de primeras letras. El ayuntamiento orduñés concede autorización el 8-10-1854.
Más adelante se verá como las aldeas tuvieron la oportunidad de mandar a los niños a las escuelas de instrucción primaria de Orduña, gratuitamente, según convenio firmado con el ayuntamiento el 13-6-1852, pero sin embargo prefirieron mantener las pequeñas escuelas rurales y así evitar los largos desplazamientos a la ciudad. También se les dio la posibilidad de mantener sus propias escuelas, sosteniéndolas con los medios establecidos.
Las relaciones con el ayuntamiento de Orduña en materia educativa no fueron todo lo buenas que cabría esperar, siendo muchas las peticiones que hicieron, como así las negativas que recibieron.
En 1890 las escuelas de Ruzabal estaban cerradas desde hacía bastantes meses, por lo que los vecinos de éstos pueblos solicitan al ayuntamiento de Orduña se reabran.
En Belandia, en 1892 y en 1904, se hacen ajustes con el maestro. En 1904 se regula la jornada laboral del maestro (3 horas de mañana y 3 de tarde ), sus vacaciones (15 días de agosto y 2 sábados mensuales por la tarde ) y sus obligaciones añadidas (servir como fiel de hechos).
A principios del siglo XX, en la escuela de Belandia, la asistencia a las clases era bastante deficiente, por lo que se proponen multar a los padres de los alumnos que no asistan a las mismas. En 1901 a las escuelas de Lendoño de Abajo asistían 32 alumnos y funcionaban bien.
Hasta principios del siglo XX una parte importante de la educación primaria se desarrollaba en escuelas particulares, pero sufragadas con derramas entre los vecinos. Suprimida esta fórmula los vecinos de Belandia se dirigen al gobernador civil a fines de 1906 mostrando su preocupación por el cierre de las escuelas que de tiempo inmemorial sostenían los 4 pueblo
En 1910 los vecinos de Lendoño de Abajo, de Arriba, Ripa y Cedélica, solicitan al ayuntamiento que al haber cesado el maestro, Lázaro Peñaranda , se provea la plaza vacante con un maestro y no una maestra. La razón de tal petición era que la asistencia a clase de día era más bien escasa.”por necesitar los padres de los hijos para las faenas del campo y ser conveniente completar su educación con las escuelas nocturnas”. El ayuntamiento de Orduña sugiere la posibilidad de que estas escuelas dejen de tener carácter oficial, ya que los maestros públicos que acudían a las aldeas, renunciaban rápidamente para conseguir una plaza mejor, y constantemente se encontraban sin maestro. Con las escuadras privadas que habían poseído e tiempo inmemorial se evitaba ese problema.
Podemos afirmar que la preocupación de las autoridades locales orduñesas por la enseñanza de la niñez y juventud, tanto desde el ayuntamiento de Orduña como desde los concejos de las aldeas, fue una constante, al menos desde el siglo XVI.
En las primeras décadas del siglo XX en Lendoño de Abajo, unos vecinos muestran su pesar ante la corporación municipal por carecer de maestro de primeras letras “por falta de recursos y poca unión, porque unos no necesitan y a otros no les conviene, y suplican que el ayuntamiento les abone alguna cantidad”. El ayuntamiento les recuerda que poco tiempo atrás disponían de 2 maestros y fueron las rivalidades entre vecinos la causa de no tener ninguno, denegándoles la petición.
Desde la delegación de inspección de primera enseñanza se ordena al ayuntamiento de Orduña la creación de 2 escuelas en Ruzabal, una en Belandia y otra en Lendoño de Abajo. El gobernador civil acepta la propuesta del ayuntamiento y que se pueda iniciar el curso el 1-9-1907 aunque parece que las obras se retrasaron algo porque se finalizaron en 1908)
Parece que hubo diferencias al ubicar la escuela en Lendoño de Abajo, en lugar del barrio de Poza. Las obras de dichas escuelas de los 2 pueblos se ejecutaron por administración con la ayuda de los vecinos, en la conducción de material y otras labores. Las obras se finalizaron en 1908, y un maestro quedó al cargo de las mismas. Los maestros tomaron posesión en el curso 1908-9, aunque las aldeas se mostraron reticentes con el profesorado que llegaba, porque se trataba de interinos que, en general, permanecían pocos meses en el cargo (parece que a las escuelas de Lendoño de Abajo acudían los niños de Ripa y Cedélica).
2.- Maestr@s en BELANDIA
Las escuelas mixtas de Belandia primero se situaban al lado de la iglesia. Fueron maestr@s: 3-1-1900: Vicente Villate; 26-12-1900: Esteban Menoyo, maestro particular; 1-8-1909: Manuel López de los Santos, cesa en su cargo; 27-10-1909: Petronilo Pernante Sánchez;10-5-1916: Lucía Gallego Arroyo; 9-10-1916: Hermenegilda Díaz de Durana; 5-9-1917: Amparo Isabel Plaza Cruz, interina; 19-11-1917: Silveria Rubio González, interina; 1-9-1919: Petra Bañares, maestra en propiedad.
3.- Maestr@s en LENDOÑO de ABAJO- LENDOÑOBEITI
Las clases mixtas se daban en la torre adjunta a la iglesia, donde también acudían los chavales de Lendoño de Arriba. Fueron profesores de la misma: 1886-1887: Luis Saíz, de 20 años; 1888-1892: Dionisio Gómez, de 18 años; 1889-1891: Lucio Austri, de 38 años; 1893: Paulino Quintana, de 19 años; 1895 :Vicente Villate, de 30 años; 1901: no había maestro; Hasta el año 1909, no había escuela oficial, anteriormente eran escuelas particulares; 1908–1909: Lázaro Peñaranda; 1910: vacante la plaza; 1910-1914: Alejandro Cámara, de 26 años; 1915: Alfredo Dorado Santiago; 1921-1962: Justo Perea, de 29 años (a este maestro parece que le acompañaba dando clases su mujer, Amelia Retes, años 1931-35)[1]; 1963: Agustin Trigueros Trigueros; 1964: Maribel Lices; desde 1965 estuvo cerrada hasta 1966; 1967-68: Maribel Lices; 1969: Sara Legarreta; 1969-1972: María Jesús Laibarra[2].
4.- Otros
La mayoría de los maestros provenían de la zona de Castilla. El 16-11-1910,, la maestra de Belandia, pide se arregle la habitación donde vive. El 7-12-1910 el maestro de Lendoño de Abajo pide se arregle el horno de su casa, etc.El maestro de Lendoño de Abajo, en 1915, Alfredo Dorado Santiago, reclama su retribución
[1] ¿Hacia el año 1930-32, no hubo una maestra en Lendoño? Yo le tengo oído a mi madre que hubo una maestra que era la madre o la abuela de una mujer que nos daba catequesis cuando yo era pequeño, en la parroquia: Pili Álava. (Nota de José Luis Ornes).
[2] Esta fue la última maestra (Laibarra) y se cerró la escuela en dicho año, bajando los niños a Orduña. ¿A dónde, a una casa situada enfrente del Santuario, en la Antigua, al otro lado de la carretera (donde Dulce); o a la Enseñanza o “escuelas nacionales”?