
La ermita de San Bartolomé

La ermita de San Bartolomé se encontraba en la cima de lo que hoy se conoce como Puerto de Orduña, justo en la línea jurisdiccional que separa las tierras alavesas de las burgalesas del Valle de Losa, en el punto kilométrico 344 y a casi novecientos metros de altitud. Para el año 1739 ya estaba derruida la ermita, recibiendo el golpe de gracia años más tarde, cuando se trazó la carretera que unía Bilbao con la Meseta Castellana, pues la carretera se trazó por el mismo lugar que ocupaba la ermita.
El terreno donde se situaba la ermita de San Bartolomé estaba rodeado por trece mojones, teniendo los cuatro de las esquinas grabadas las armas de Orduña y de Vizcaya, así como las de Villalba de Losa, puesto que el terreno era privativo de la ciudad de Orduña y de la villa de Villalba de Losa.
La ciudad de Orduña tenía la obligación de tener aderezado el camino que, desde la ciudad, conducía a la ermita a través de la venta Arbín (hoy caserío) y ambas poblaciones tenían la obligación de enviar a sus respectivos alcaldes, que acudían con vara alta de justicia el día 24 de Agosto, festividad de San Bartolomé, día que la ciudad de Orduña tenía el compromiso de enviar un sacerdote que dijera la misa en honor del santo. Sabemos que la puerta de la ermita miraba «hacia el brocal de la peña», es decir hacia el noreste.
La primera noticia por escrito que tenemos sobre la existencia de esta ermita es del año 1494 cuando una Real Ejecutoria ordena «poner caseros e guardas en la yglesia e penna de San Bartolomé que estava en somo de la dicha penna de Salvada». La ermita dio nombre al puerto, de modo que, durante varios siglos, este puerto se conoció como puerto de San Bartolomé; hoy es conocido como puerto de Orduña, algo que puede sorprender, si se sabe que todo su trazado ocupa por completo tierras alavesas. Cuando el año 1772 se abrió la actual carretera que lleva hacia el desfiladero de Pancorbo, se proyectó colocar en lo alto del puerto, a ambos lados de la carretera, las imágenes de San Bartolomé y de San Rafael, proyecto que no se llevó a cabo por falta de presupuesto.
Por documentación escrita sabemos que había otra ermita dedicada a San Bartolomé, situada en la cuenca de Orduña, en unos términos que servían de prados a la ganadería de la ciudad, en la parte norte: «del prado abaxo en todas partes fazia Arbieto e Gueleí§ubi (puente junto a La Muera y que luego se conocería como puente de Mendichueta), e de allí arriba fazia Sant Bartolomé non las traigan ni puedan traer ni pasar a pasto»
Desconocemos cualquier conexión, pero opinamos que puede ser de interés dejar constancia de que, junto al importante camino que cruzada puerto Toro, tanto al norte como al sur de la Sierra Cantabria, al sur de Alava, hubo sendas ermitas dedicadas a San Bartolomé; una estaba al norte de Laguardia, a pie de sierra, y otra al oeste de la villa de Lagrán, en la Montaña Alavesa, ermita que aún se puede visitar y que se levantó en sustitución de otra anterior que estaba metida en plena sierra.
Salvador Velilla. Tomado de la Revista Aztarna.